Hoy vamos con algo dulce. Las famosas cookies de chocolate. Esta receta la tomé del blog Aroma de Albahaca os dejo el enlace de la auténtica receta : Galletas con chispas de chocolate.
Es la segunda vez que las hago y tienen mucho éxito, pero tengo que hacerlas muy de vez en cuando.
A mi fan number one le encantarán, así que le dedico esta receta y la animo a prepararlas, son muy fáciles de hacer.
Decir que modifiqué un poco la receta original pero la esencia es la misma.
Ingredientes: ( para unas 12 cookies porque las hago gordonas)
- 120 gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 75 gr de azúcar blanco
- 75 gr de azúcar moreno
- 1 cucharadita de aroma de vainilla o la mitad de una vaina de vainilla
- 1 huevo
- 240 gr de harina
- 1 sobre de levadura Royal
- 170 gr de pepitas de chocolate
- un puñadín de nueces de pecan ( peladas)
- un poco de sal
Preparación:
Mezclamos en un bol la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar ( blanco y moreno) hasta hacer una especie de masa.
Añadimos el huevo y la vainilla. Mezclamos.
Incorporamos poco a poco la harina ( tamizada con un colador). Echamos el sobre de levadura royal y un poco de sal. Mezclamos todo.
Echamos las pepitas de chocolate y las nueces partidas. Mezclamos.
Tapamos la masa con papel de film y guardamos la masa, más o menos,una hora en la nevera.
Tapamos la masa con papel de film y guardamos la masa, más o menos,una hora en la nevera.
Vamos formando bolitas y las colocamos en la bandeja del horno con papel sulfurizado separándolas bien unas de las otras para que luego no se peguen. Las aplastamos ligeramente.
Las metemos en el horno precalentado a unos 180º el tiempo más o menos de 15 minutos a 30 minutos, depende del grosor.
Consejo: Yo sé que están hechas cuando la masa de la galleta comienza a agrietarse.
Las sacamos del horno y las colocamos en una rejilla para que se enfríen.
Como anécdota contar que el día que preparé estas galletas estaba viendo la película de Woody Allen "Granujas a medio pelo" en la que Woody allen hace de un ex-convicto que está harto de su trabajo de lavaplatos, pero se le ocurre una brillante idea: abrir una tienda de galletas, contigua a un banco, con la ayuda de su mujer y un par de rateros de poco monta. Mientras su mujer atiende el negocio, él y sus socios excavan un túnel que conduce al interior del banco. Pronto se harán ricos, pero no de la manera que habían pensado.
Recomiendo esta película, es muy buena y graciosa. Para mí una de las mejores de Woody Allen.